Compartimos material recibido desde el Museo Casa de Rivera con motivo de la realización de exposición de restos del roedor mencionado. (Adaptado)
A principios de enero de 2008, la noticia del descubrimiento del roedor más grande de todos los tiempos repercutió inmediatamente en los medios de prensa internacionales quizás como ninguna otra noticia científica en la historia del Uruguay.
En el trabajo titulado "The largest fossil rodent" publicado en la revista científica británica Proceedings of the Royal Society of London por Andrés Rinderknecht y R. Ernesto Blanco se reporta el hallazgo de un cráneo casi completo de 4 millones de años de antigüedad de una nueva especie de roedor: Josephoartigasia monesi.
El hallazgo fue en San José , lo realizó un paleontólogo aficionado,Sergio Viera ,quien lo donó al Museo Nacional de Historia Natural y Antropología (MUNHINA) hace unos 20 años.
Pese a la importancia de la pieza, este fósil permaneció sin ser estudiado hasta 2006, cuando el paleontólogo A. Rinderknecht comenzara su estudio; seguramente la falta de presupuesto, el casi nulo apoyo gubernamental y la falta de personal científico trabajando en el MUNHINA fueron obstáculos para realizar las investigaciones.
Los dinómidos: gigantes entre gigantes:
Hoy en día existe un roedor llamado "pacarana" o falsa paca" (Dinomys branickii) que habita zonas selváticas de la región suroeste de Sudamérica. que es uno de los roedores vivientes de mayor tamaño, con una masa corporal de hasta 15 kg, único superviviente de la familia (Dinomyidae) que en el pasado geológico tuvo gran diversidad.
Los fósiles demuestran que hasta hace unos 3 o 4 millones de años los dinómidos se encontraban distribuidos por toda Sudamérica; sin embargo es en esa fecha que desaparecen todos los integrantes de la familia, excepto la pacarana .No se sabe por qué se extinguieron.
Todos los dinómidos eran herbívoros, es probable que muchos de ellos (incluyendo al Josephoartigasia monesi) se alimentaran de hojas y frutas.
Otros roedores emparentados con los dinómidos son los carpinchos, los hámsteres y los coipos. Las ratas son roedores, pero no están cercanamente emparentados con el roedor gigante.
Importancia del hallazgo:
La existencia de roedores gigantes en Sudamérica no es una novedad para los científicos , pero la gran mayoría de los restos conocidos de estos animales eran huesos muy fragmentarios que no aportaban mucha información a los paleontólogos.
Quizás lo más importante de este descubrimiento sea que se trata de un cráneo completo magníficamente preservado que brinda gran cantidad de información hasta el momento desconocida por los científicos.
Del estudio de la pieza puede deducirse qué tipo de dieta poseía este gigantesco roedor, cómo era su forma general, etc.
El otro punto de gran interés es el gran tamaño del fósil; estimado con una masa corporal de unos 1000 kg; (hoy la mayoría de los roedores pesan unos pocos gramos).
Además, este material permitirá realizar por primera vez estudios sobre la anatomía interna del cráneo (usando un tomógrafo), estudios químicos sobre los dientes para establecer más en detalle el tipo de dieta, trabajos de reconstrucción muscular y mecánica de masticación, por ejemplo.
Las reconstrucciones que ilustran las imágenes fueron realizadas por Gustavo Lecuona.
Datos generales de Josephoartigasia monesi
Masa estimada: 1 tonelada.
Largo estimado (desde el hocico hasta la punta de la cola): 2,5 metros.
Altura estimada: 1,20 metros. Dieta: Herbívoro.
Antigüedad: 4 millones de años.
Significado del nombre: Josephoartigasia en honor a José Artigas y monesi por el paleontólogo uruguayo Álvaro Mones.
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