La historia de San Valentín se remonta a una fiesta pagana en la antigua Roma, donde se adoraba al Dios del Amor. Se le ofrendaba regalos al dios, para la buena fortuna en el amor.
El Dios del Amor era el dios griego Eros, que los romanos llamaban Cupido.
En el siglo III, también en Roma, había un sacerdote cristiano llamado Valentín que celebraba bodas en secreto, porque estaban prohibidas. El cristianismo entonces era una religión perseguida y reprimida.
Finalmente Valentín fue descubierto, puesto en prisión y ejecutado un 14 de febrero, no sin antes haber enviado una última carta a una amiga, despidiéndose de ella. Este hecho dio origen a la tradición de enviar cartas el 14 de febrero, día de San Valentín, para expresar el amor y el cariño que sentimos por otras personas.
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